El miembro más veterano de la parrilla de MotoGP está hecho un chaval si atendemos a la inercia que lleva en las últimas fechas. Johann Zarco ganó en Le Mans, delante de una hinchada absolutamente entregada al héroe local, y a punto estuvo de hacerlo dos semanas más tarde, en Silverstone, donde terminó el segundo, a solo cuatro segundos de Marco Bezzecchi.

Esta serie de resultados le recolocaron el quinto en la tabla general de puntos, y le significaron como el primero de la clasificación que no compite sobre una Ducati. Una auténtica machada por varios motivos, todos ellos relevantes. A sus 34 años, el francés es capaz de plantar batalla a los chavales que llegan a la categoría de las motos pesadas con ganas de comerse el mundo. Y lo hace subido a una Honda que pertenece a un equipo satélite, por más que él tenga estipulado recibir el trato de corredor oficial. Los medios y la cobertura, en cualquier caso, nunca serán las mismas en la escudería de Lucio Cecchinello, que en la propia de HRC.

Independientemente del tremendo mérito que tiene lo que está haciendo Zarco, que está inmerso en las negociaciones para reforzar su vínculo con el constructor de Tokio, esa brillantez deja a la intemperie a Somkiat Chantra, su vecino de taller.

El tailandés marcha el último en la clasificación sin haber estrenado todavía su casillero de puntos, después de que su andadura en MotoGP sea demasiado deficitaria incluso para un novato. Su falta de competitividad es flagrante, hasta el extremo de convertirse en un problema serio, no solo para LCR sino también para Honda, responsable directa de su promoción desde Moto2, en una decisión que se tomó más por cuestiones comerciales, que deportivas.

Somkiat Chantra, LCR Honda, habla con uno de sus técnicos

Somkiat Chantra, LCR Honda, habla con uno de sus técnicos

Foto de: Gold and Goose Photography / LAT Images / via Getty Images

La llegada de Chantra a MotoGP es consecuencia directa de dos negativas. La primera fue de Takaaki Nakagami, que prefirió dar un paso al lado y pasar a engordar la nutrida nómina de probadores del fabricante. La segunda, de Ai Ogura, que antes incluso de proclamarse campeón del mundo de Moto2 decidió desvincularse de Honda y aceptar la propuesta que le hizo Trackhouse, con una Aprilia.

Ante esa tesitura y con los requisitos que sí o sí debía cumplir para esa vacante el ‘elegido’, las opciones eran escasas. Tanto, que Honda se decantó por el 12º clasificado del pasado campeonato de Moto2, que terminó el curso a 170 puntos de Ogura, y cuyo palmarés se reduce a dos triunfos y seis podios en total, ninguno de ellos firmado en 2024. Un desenlace llamativo que se explica básicamente a partir del compromiso adquirido por LCR con Honda, y, más concretamente, con el brazo asiático de la compañía, patrocinado por Idemitsu.

La petrolera nipona no solo decora el prototipo de Chantra, sino que promueve la vía de desarrollo de jóvenes pilotos asiáticos, que va desde la Asia Talent Cup y que llega hasta esa RC213V de la estructura monegasca que ahora conduce el #35. Una buena fórmula siempre que el corredor que le dé sentido sea merecedor del lugar que ocupa. Y eso es, precisamente, lo que está en duda en el caso del primer tailandés en llegar a MotoGP.

Si uno analiza un poco su concurso en las seis pruebas en las que ha participado –se perdió el de Francia al sufrir complicaciones tras operarse de síndrome compartimental–, corre el riesgo de pensar que en vez de una progresión ha habido una regresión. En la mayoría de los grandes premios ha terminado el último. Pero lo más curioso del asunto es que el margen que le ha separado de los distintos ganadores ha ido ‘in crescendo’ con el paso del calendario. Los 31 segundos que transcurrieron entre que Marc Márquez cruzó la meta en Buriram y él, se convirtieron en más de un minuto hace diez días, en Silverstone.

Entre ambas pruebas encontramos 38 segundos que le separaron también de Márquez, en Qatar; el minuto que hubo entre Bagnaia y él, en Austin, o el abandono en Jerez, en la 12ª vuelta y cuando ya perdía 25 segundos respecto del líder de la prueba (Alex Márquez).

Lucio Cecchinello, Team LCR Honda

Lucio Cecchinello, Team LCR Honda

Foto de: Gold and Goose Photography / LAT Images / via Getty Images

Los problemas que arrastra en los antebrazos y que le llevaron a pasar por el quirófano no le ayudan, pero tampoco justifican su pobre rendimiento. Motorsport.com entiende que los ingenieros de HRC no tienen en cuenta los datos descargados de la moto de Chantra, que, en muchos casos, rueda más de un segundo y medio por vuelta más lento que los otros tres corredores de la marca. Tener hipotecado el 25% del potencial de desarrollo no parece una gran estrategia en ningún caso. Pero aún menos en un constructor que trata de recuperar el terreno perdido en los últimos años. 

La relación contractual que mantiene LCR con Honda deja en manos de la fábrica la elección de los dos pilotos. En el caso de Zarco, Cecchinello espera poder quedarse con él, siempre que el agente del de Cannes cierre las negociaciones que mantiene con HRC.

Habrá que ver qué ocurre con Chantra, que de momento no ha cumplido con las expectativas, pero que todavía tiene algo de crédito para reaccionar. “El proyecto Idemitsu, con Nakagami, fue bastante bien a nivel deportivo. Después, la moto perdió competitividad. El año pasado, Honda decidió pasar página y traer a Somkiat. Es verdad que esperábamos más de él, pero también lo es que ha sufrido bastante por los problemas de síndrome compartimental”, reflexiona Cecchinello, en conversación telefónica con Motorsport.com.

Por si te lo perdiste:

En lo relativo al lado del taller del tailandés, la posición del propietario de LCR no es sencilla. Siempre diplomático, él prefiere destacar el privilegio que supone ser el socio de la compañía más potente del paddock, por encima de la problemática por los malos resultados de Chantra: “Para Honda, el mensaje que lanza a nivel social, al apostar por un piloto asiático, es muy importante. El problema de verdad sería que se fuera un patrocinador como Idemitsu”.

Así las cosas, las partes implicadas se enfrentan a una etapa que se avecina clave para decidir el futro de esa ‘segunda’ Honda de LCR. Motorsport.com interpreta que a Chantra se le va a dar un poco más de tiempo para que muestre algo que avale su continuidad. De no producirse este punto de inflexión será difícil, hasta para Honda e Idemitsu, sus principales valedores, mantenerle encima de la moto el año que viene.

En este artículo

Oriol Puigdemont

MotoGP

Johann Zarco

Lucio Cecchinello

Somkiat Chantra

Team LCR

Sea el primero en enterarse y suscríbase para recibir actualizaciones por correo electrónico en tiempo real sobre estos temas.



Fuente: https://lat.motorsport.com/motogp/news/zarco-gran-momento-subraya-problema-lcr/10729551/?utm_source=RSS&utm_medium=referral&utm_campaign=RSS-MOTOS&utm_term=News&utm_content=lat

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *