Tras un prolongado retraso por la lluvia, los pilotos de la Indy 500 han salido finalmente a pista poco después de las 14:30 (hora del este de EE.UU.) y la pista se ha puesto a disposición de todos los coches. Consiguieron entrenar unas tres horas hasta que un rayo cercano puso fin a la sesión unos 30 minutos antes de lo previsto.
No hubo incidentes durante las tres horas y los Chevrolet del equipo Penske lideraron la carrera con Will Power marcando una vuelta rápida de 227.026mph en su 61ª vuelta en pista. Le siguió su compañero de equipo Josef Newgarden con 226.971mph, mientras que el líder del campeonato y piloto del Chip Ganassi Racing Honda Alex Palou fue tercero con 226.673mph.
Scott Dixon y Scott McLaughlin completaron los cinco primeros con Helio Castroneves, Alexander Rossi, Marcus Armstrong, Marcus Ericsson y Marco Andretti completando el resto de los diez primeros.
Los coches de Prema Racing fueron los más lentos, con Robert Shwartzman 33º y Callum Ilott 34º (último) en la tabla de velocidades.
En cuanto a las velocidades sin remolque, Kyle Kirkwood lideró esa columna a 219.497mph, que llegó en su sexta vuelta rápida.
Kyffin Simpson fue el piloto que más vueltas dio, con un total de 84. Kyle Larson, que llegaba a Indianápolis después de una dominante victoria en la NASCAR Cup en Kansas, dio 45 vueltas y se situó 24º en a 221.207 mph. Larson intentará completar el “doblete” este año, después de un intento fallido en 2024 (debido a las condiciones meteorológicas), corriendo la Indy 500 y la Coke 600 el mismo día.
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