Oliver Rowland se convirtió en el segundo vencedor de la Fórmula E en otras tantas carreras tras lograr una inesperada victoria en los últimos compases del E-Prix de Ciudad de México.
Pero mientras que la destreza de adelantamiento del británico le dio la victoria, el rendimiento de los pilotos de Porsche, Antonio Felix da Costa y Pascal Wehrlein, fue una señal de advertencia ominosa para sus rivales.
Tras otra emocionante carrera de la temporada 2024-25, aquí van cinco cosas que aprendimos del E-Prix de Ciudad de México:
1. El ritmo dominante de Porsche es una advertencia para sus rivales a pesar de la falta de victorias
Porsche no ganó en México, pero tenía el paquete dominante y podría recibir alguna paliza en la temporada que se avecina
Foto de: Alastair Staley / Motorsport Images
El Autódromo Hermanos Rodríguez de Ciudad de México ha sido un coto de caza feliz para Porsche. Pascal Wehrlein consiguió su primera victoria y la del fabricante alemán en la Fórmula E en el circuito en 2022, antes de otra victoria dominante hace 12 meses.
Wehrlein, vigente campeón, subrayó el dominio del nuevo paquete Gen3 Evo al adjudicarse dos poles consecutivas esta temporada, la primera el pasado fin de semana al volante de un chasis recién construido tras su espectacular vuelco en Sao Paulo.
Era la primera vez que un piloto lograba cuatro poles de Fórmula E en el mismo escenario, mientras que su compañero de equipo, Antonio Felix da Costa, se aseguró de que Porsche consiguiera copar la primera fila de la parrilla de la Fórmula E.
En la carrera, la pareja dominó los procedimientos, liderando 26 de las 36 vueltas entre los dos, y hasta que un coche de seguridad posterior les puso en la retaguardia contra el Rowland propulsado por el Attack Mode, probablemente tenían las dos primeras posiciones aseguradas.
“Pensaba que hoy teníamos un 1-2 para el equipo, y luego el coche de seguridad… todavía tengo que volver atrás y analizarlo”, dijo da Costa. “Tal vez Oliver hubiera tenido suficiente para llegar al frente o no, supongo que nunca lo sabremos, pero nos arruinó un poco la fiesta”.
A pesar de no haber registrado una victoria todavía, otro segundo lugar en dos carreras significa que da Costa lidera la clasificación de pilotos por primera vez desde su temporada ganadora del título en 2019-20, 12 puntos por delante de Rowland y Mitch Evans, mientras que Porsche ya lidera la tabla de equipos por 31 puntos de McLaren.
Basándose en la forma actual, las victorias de Porsche parecen inevitables en el futuro y, dado que da Costa entró en una racha de victorias de cuatro de cinco carreras la temporada pasada, hay muchas posibilidades de que tal hazaña se repita en las 14 carreras restantes, todo lo cual tendrá a otros equipos preocupados con razón.
2. Rowland demuestra ser una auténtica amenaza tras su impresionante victoria
Rowland demostró que aprovechará cualquier oportunidad para ganar y debe ser considerado un factor esta temporada
Foto de: Andreas Beil
“Creo que habría llegado hasta ellos (los tres primeros), pero creo que si les hubiera adelantado (con el Modo Ataque) habría consumido demasiado y habría luchado por mantener el liderato, es mi intuición”.
Queda por ver si Rowland habría tenido suficiente ventaja incluso con seis minutos de Modo Ataque para recuperar varios segundos al trío de cabeza que le precedía, adelantarlos y conseguir la victoria en México.
Pero de lo que no hay duda es de cómo el británico fue implacable en su búsqueda de la victoria cuando un coche de seguridad tardío, que se retiró rápidamente, le permitió lanzar su ataque con potencia extra.
Despachar a Jake Dennis inmediatamente en la reanudación, lanzarse por el interior de un desprevenido Wehrlein en la curva 5, luego ir rueda a rueda con da Costa y tomar la delantera con sólo unos segundos de potencia extra restante, mostró a Rowland en su mejor momento.
También sirvió para recordar al resto de la parrilla que, aunque la combinación Rowland/Nissan había sido una apuesta arriesgada para el campeonato la temporada pasada, esta campaña son una amenaza aún más potente en la era Gen3 Evo.
De no haber sido por una infracción técnica, la victoria también podría haber caído del lado de Rowland en Sao Paulo, y teniendo en cuenta que los dos últimos campeones, Dennis y Wehrlein, ganaron en México en su camino hacia el título, Rowland podría convertirse en la mayor espina clavada para Porsche esta temporada.
3. Jaguar se enfrenta a una dura batalla y se queda rezagado
Cassidy no volvió a puntuar, pero afirma que Jaguar tiene motivos para tener esperanzas en la segunda mitad de la temporada.
Foto de: Oscar Lumley – Motorsport Images
Jaguar, vigente campeón por equipos, sufrió una tórrida prueba en Ciudad de México tras no sumar ningún punto y parece estar rezagado en comparación con Porsche y Nissan, al carecer de la eficacia y el ritmo absolutos de sus rivales.
Evans, vencedor en Sao Paulo, admitió que el fabricante británico “definitivamente tiene trabajo por hacer”, ya que el neozelandés fue incapaz de seguir el ritmo de los pilotos de cabeza durante la carrera tras clasificarse quinto.
Evans rompió su suspensión en una colisión con Nico Muller cuando el piloto de Andretti sufrió una pérdida momentánea de potencia.
El fin de semana fue aún peor para su compañero de equipo, Nick Cassidy, que no ha conseguido puntuar en ninguna de las dos primeras carreras. Obligado a salir desde la parte trasera de la parrilla tras ser desposeído de su tiempo de clasificación debido a una infracción en el mapa del pedal del acelerador, fue incapaz de hacer ningún progreso significativo en la parrilla como Evans había hecho en el arranque de la temporada. El aspirante al título del año pasado sólo pudo clasificarse 12º.
“Creo que estamos un poco por detrás de donde queremos estar con este coche”, dijo Cassidy. “Tenemos algunas cosas muy interesantes en proyecto y creo que tenemos que esperar hasta el descanso después de (la próxima ronda en) Yeda para ver cómo se desarrollan. Probablemente tengo más esperanzas para la segunda mitad de la temporada que ahora mismo.”
4. El fin de semana para olvidar de McLaren muestra la naturaleza brutal de la Fórmula E
La penalización a Barnard tras la carrera coronó un fin de semana difícil para McLaren, que no sumó ningún punto.
Foto de: Alastair Staley / Motorsport Images
Al entrar en el E-Prix de Ciudad de México, McLaren ocupaba el primer puesto en la clasificación de equipos gracias al podio de Taylor Barnard en Sao Paulo -el piloto más joven en subir a un podio de FE- y al cuarto puesto de Sam Bird. Pero las máquinas papaya dejaron sin puntos la segunda prueba de la temporada, lo que demuestra cómo la suerte en el campeonato totalmente eléctrico puede oscilar de una prueba a otra.
Bird se sintió agraviado por Nyck de Vries al ser bloqueado por el piloto de Mahindra en la clasificación, lo que le costó un puesto en los duelos, mientras que el neerlandés recibió una penalización de tres puestos en la parrilla. Los dos pilotos volvieron a encontrarse en la carrera, cuando de Vries se abalanzó por el interior de Bird en la curva 5 en los primeros compases de la carrera y el británico hizo contacto con él, provocando un pinchazo en el segundo Mahindra de Edoardo Mortara.
“Sin ánimo de ofender, creo que Nyck ha destrozado el fin de semana, lo haya querido o no”, dijo Bird, que recibió una penalización de cinco segundos por el contacto con Mortara y finalmente se clasificó 18º.
La presión incorrecta de los neumáticos en una pista húmeda que se iba secando en la sesión clasificatoria hizo que Barnard sólo saliera 19º, pero el británico pudo escalar hasta la 10ª posición antes de la bandera a cuadros tras haber completado a tiempo toda su asignación del Modo Ataque.
“Tuve que frenar justo antes de la línea de meta para lograrlo, así que estuvo muy cerca. El equipo me tenía la cuenta, pero lo vi y fui consciente”, dijo Barnard.
Sin embargo, todo fue en vano, ya que el piloto de 20 años recibió una penalización de cinco segundos tras la carrera por “salirse de la pista y obtener una ventaja duradera”, lo que le hizo descender hasta la 14ª posición, mientras que McLaren cayó a la segunda plaza de la clasificación en un fin de semana para olvidar.
5. La pista y la afición de Ciudad de México vuelven a brillar
México se ha ganado su lugar como favorito tanto de los aficionados como de los pilotos.
Foto de: Andreas Beil
Con un trazado más corto que el de la Fórmula 1, el Autódromo Hermanos Rodríguez se ha convertido en uno de los favoritos del calendario de la Fórmula E para pilotos, equipos y aficionados, en la novena edición de la carrera.
No sólo es capaz de ofrecer grandes carreras, con su mezcla de curvas de alta y baja velocidad, sino que la sección de estadio única de la pista también crea un ambiente de carnaval que no se ve en ningún otro lugar del calendario.
Este año se volvieron a agotar las entradas, con más de 40.000 espectadores, muchos de los cuales permanecieron diligentemente detrás de los garajes con la esperanza de conseguir una foto o un autógrafo con sus pilotos favoritos.
“Me gustaría que fuera doble, lo llevo pidiendo desde hace un par de años”, dijo Wehrlein tras subir al podio. “Me encanta venir aquí por todos los aficionados, siento que son los mejores aficionados de nuestro calendario de carreras”.
“Tan entusiastas, aman el automovilismo, aman las carreras, nos aman a los pilotos, tantos regalos y obsequios, simplemente disfruto estar aquí”.
No es de extrañar que el circuito de la Ciudad de México sea uno de los favoritos para el campeón defensor Wehrlein después de su última gran actuación en la pista
Foto de: Joe Portlock / Motorsport Images
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Stefan Mackley
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