Hace poco más de una semana, Max Verstappen fue sancionado por los comisarios de la FIA con servicios comunitarios por su lenguaje durante la rueda de prensa del jueves en la previa del Gran Premio de Singapur.
Esta sanción fue más dura que las que otros habían recibido anteriormente por decir palabrotas en la rueda de prensa. Por ejemplo, los jefes de equipo Toto Wolff y Frédéric Vasseur se libraron con una advertencia en Las Vegas el año pasado por un incidente similar.
En Singapur, el tricampeón del mundo dejó claro cómo se sentía con su castigo al responder muy brevemente a las preguntas que se le hicieron durante las ruedas de prensa oficiales tras la clasificación y la carrera, antes de hablar largo y tendido con los medios fuera de la sala.
Verstappen padre tampoco se mostró de acuerdo con los servicios comunitarios aplicados a su hijo.
“Creo que es lo más ridículo que escuché”, dijo Jos Verstappen a Motorsport.com en el Rally de Bélgica Oriental, en el que él y su copiloto Renaud Jamoul terminaron cuartos. “Pero también lo vemos en el rally”, agregó.
Verstappen se refiere a una multa en suspenso de 30.000 euros impuesta al piloto del WRC Sébastien Ogier por ser crítico con los oficiales en el Rally Acrópolis en Grecia a principios de este mes. El ocho veces campeón del mundo de rallies protestó de forma similar a Verstappen en la prueba del WRC en Chile este fin de semana, donde también dio solo respuestas cortas en las entrevistas posteriores a cada etapa.
“La FIA nos dijo que mantuviéramos la boca cerrada”, dijo más tarde.
El Presidente de la FIA, Mohammed ben Sulayem, había hecho saber el verano pasado que el texto del Código Deportivo Internacional había sido modificado después de que una investigación demostrara que “los comentarios negativos de los pilotos y los miembros superiores de los equipos pueden provocar más odio hacia los oficiales en las redes sociales”.
Además, Ben Sulayem reveló recientemente en una entrevista exclusiva con Motorsport.com que le gustaría que los pilotos cuidaran un poco más su lenguaje.
“No creo que la FIA lo esté haciendo muy bien”, dijo Jos Verstappen en Bélgica, antes de concluir con una carcajada: “¡Pero no voy a decir demasiado al respecto!”.
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