Sergio Pérez apenas rescató un punto del Gran Premio de Singapur luego de haber condenado parte de su carrera en la sesión de clasificación donde se ubicó en la posición 13, un resultado que lo mantiene relegado en la octava posición del campeonato de pilotos.
Al arrancar la competencia, Checo Pérez saltó al top 10 por detrás del argentino Franco Colapinto. El sudamericano arrancaba en el puesto 12 y aprovechó para mantenerse por delante del mexicano.
El integrante de Red Bull mantenía la persecución sobre Colapinto pero sin poder adelantarle. Fue hasta la mitad de la carrera cuando logró pasar al Williams del argentino gracias a un undercut y regresar rápido a la pista.
Con la ronda de paradas completada, Checo Pérez se posicionó detrás del Haas de Nico Hulkenberg. Al inicio del último tercio de las 62 vueltas pactadas alcanzó al coche del alemán, pero mientras intentaba aprovechar el DRS parea después ir al ataque de Fernando Alonso, el mexicano fue perdiendo la adherencia de sus neumáticos.
Franco Colapinto, Williams FW46, Sergio Pérez, Red Bull Racing RB20
Photo by: Andy Hone / Motorsport Images
Imposibilitado de atacar, Checo Pérez quedó en décimo perdiendo más terreno en el intento de recuperar el séptimo puesto del campeonato de pilotos ante George Russell quien fue cuarto.
El mexicano destacó que el coche aún no era fácil de manejar, sumado a ello, el tren de DRS dificultó los adelantamientos cuando cerró la brecha con Hulkenberg y Alonso.
“Era muy difícil de pasar. Tuvimos una buena arrancada, desafortunadamente no pudimos hacer más. Creo que perdimos la posibilidad de hacer el undercut como lo hizo Carlos (Sainz). Al final pudimos hacer el undercut a Franco, pero fuera de eso me pasé detrás de Nico toda la carrera”, expresó a la cadena FOX Sports.
Al ser cuestionado sobre la sensación del RB20 destacó que Singapur exhibió de nuevo las carencias.
“Fue complicado, especialmente en los brincos. El coche brincaba muchísimo y ese era el principal problema el día de hoy. En todos los brincos perdía bastante”.
“Tenemos que mejorar mucho nuestro rake”, indicó el integrante de Red Bull quien espera ver la realidad del coche en el Gran Premio de los Estados Unidos. “Afortunadamente hasta Sao Paulo todo será mejor y esperemos en Austin regresar a nuestro nivel”.