Lewis Hamilton le ha dicho a Max Verstappen que no complete el “trabajo de interés público” que le han impuesto como castigo por usar malas palabras en una conferencia de prensa de la FIA.
El vigente campeón del mundo fue convocado por los comisarios en Singapur después de decir que “sabía que el coche estaba jodido” al responder a una pregunta durante una sesión de prensa de pilotos el jueves en referencia a su actuación en el Gran Premio de Azerbaiyán el pasado fin de semana.
Al final, la FIA le ordenó “realizar algún trabajo de interés público”, y el furor en torno a las palabrotas de los pilotos se convirtió en el principal tema de conversación de la semana previa al Gran Premio del domingo.
Tras no responder a todas las preguntas que se le formularon en la rueda de prensa posterior a la clasificación, después de colocar su Red Bull segundo junto a su rival por el título y poleman Lando Norris, Verstappen celebró a continuación una sesión informativa improvisada mientras caminaba por el paddock de Singapur rodeado de periodistas.
Hamilton había salido en apoyo de su antiguo enemigo durante la propia rueda de prensa: “Creo que es un poco una broma, para ser honesto”, dijo sobre la sanción impuesta.
“Esto es la cima del deporte, se cometen errores. Yo desde luego no lo haría y espero que Max no lo haga”.
También Norris había dicho que no era el resultado correcto: “(Él) se lo merecía, por lenguaje soez así que…”, bromeó antes de añadir: “Creo que es bastante injusto, no estoy de acuerdo con nada de esto”, expresó el poleman.