La era moderna de la Fórmula 1 está plagada de ejemplos de equipos top que pagan un alto precio por seguir tratando igual a sus dos pilotos.
En 2007, cuando McLaren juntó entonces campeón del mundo Fernando Alonso con el debutante Lewis Hamilton, las batallas internas hicieron que ambos pilotos perdieran el título por un solo punto, que fue a parar a manos de Kimi Raikkonen con Ferrari.
Otras rivalidades destacadas, como Senna/Prost (McLaren), Hamilton/Rosberg (Mercedes) y Webber/Vettel (Red Bull), tuvieron menos impacto en el resultado final, ya que se produjeron en una época de dominio de sus respectivos equipos.
Sin embargo, mediante varios escenarios, llevaron a la desestabilización de los equipos y a que se rompieran esas alineaciones.
Pero mientras que la historia sugiere que tener dos pilotos número uno sale más veces peor que mejor, el CEO de McLaren, Zak Brown, mantiene que las cosas serán diferentes con Lando Norris y Oscar Piastri.
Ambos pilotos han conseguido sus primeras victorias en la F1 antes de las vacaciones de verano de 2024, consolidando su estatus como pilotos de élite en la parrilla.
Mientras que Norris logró una emotiva victoria en Miami tras cinco años de espera, la de Piastri en Hungría se produjo después de que Norris se pusiera en cabeza durante una ronda de paradas en boxes y solo devolviera la posición al australiano al final, con un intercambio de posiciones que restó algo de brillo al primer triunfo de Piastri.
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Photo by: Steve Etherington / Motorsport Images
Norris se mostró arrepentido por no haber devuelto la posición antes y el asunto se trató internamente, pero fue un primer atisbo de lo incómodas que pueden llegar a ser las cosas en el futuro si McLaren sigue teniendo un coche capaz de conseguir más victorias y dobletes.
En declaraciones en exclusiva a Motorsport.com, Brown mostró que está convencido de que la cultura del equipo McLaren es lo suficientemente fuerte como para sobrevivir teniendo en igualdad de condiciones a Norris y Piastri, incluso si los libros de historia de su propio equipo están llenos de cuentos con moraleja que pueda invitar a lo contrario.
Cuando se le preguntó por qué creía que el hecho de tener números uno iguales funcionaría esta vez para McLaren, Brown respondió: “Las relaciones, la comunicación y las dos personas que tenemos”.
“No nos equivoquemos. Ambos quieren ser números uno y son ambos números uno. Simplemente no tenemos un número dos”.
“Pero corren por el equipo. Son el tipo de individuos que creo que pueden competir duro entre ellos y ser el número uno en su propia mente y respetar el hecho de que tenemos dos coches número uno. Y siempre lo hemos hecho y siempre lo haremos”.
Brown no descartó favorecer a un piloto sobre el otro una vez que haya un campeonato de pilotos en juego, pero como Norris está por detrás de Max Verstappen a 78 puntos, y Piastri a otros 32 puntos más, ese momento aún no ha llegado para McLaren.
“Obviamente, si avanza el campeonato y un piloto tiene más posibilidades que otro, entonces podrías empezar a mirar las cosas que haces estratégicamente de manera diferente”, reconoció.
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Photo by: Andy Hone / Motorsport Images
“Pero los tratamos por igual. Lo saben, lo disfrutan y respetan nuestras decisiones cuando a veces tenemos que tomarlas. Son muy respetuosos con eso. Así que creo que somos afortunados de tener a las dos personas que tenemos”.
A la pregunta de si la gestión de Norris y Piastri será la prueba más dura de la cultura de equipo que él y el director del equipo, Andrea Stella, están intentando construir, respondió: “Creo que las culturas se construyen solas. Tú marcas la dirección y el tono, pero luego no puedes forzarlo”.
“Andrea y yo, y todos los que estamos aquí, somos competidores. Somos justos, bastante agresivos en la búsqueda del rendimiento. Pero de una manera justa, no de ganar a toda costa”.
“Creo que así es también el equipo, así que hay un gran ambiente en el box”.